El Loews Regency New York Hotel es el lugar perfecto para una escapada romántica, un divertido viaje en familia por los lugares emblemáticos o un memorable viaje de negocios en un extraordinario hotel de lujo cerca de Central Park. A sólo unos pasos, descubrirás las principales atracciones de la ciudad, como el Parque Central, la Milla de los Museos, las tiendas de Madison Avenue, Broadway y mucho más.
Respecto a la ubicación y el transporte, el Loews Regency New York Hotel está a sólo 250 metros de la calle 59 y a 3,5 km de Penn. Puedes tomar la línea de metro Lexington Avenue, a sólo dos manzanas, para llegar rápidamente al Bronx y animar a los New York Yankees. También puedes disfrutar del Parque Central, ese majestuoso pulmón verde de 843 acres, ya sea caminando, corriendo, en bicicleta o preparando un picnic para disfrutar en Great Lawn o Sheep Meadow.
Las habitaciones del Loews Regency New York ofrecen comodidades modernas y accesibilidad para personas con movilidad reducida. Desde lujosas sábanas y albornoces hasta tecnología de última generación, como televisores inteligentes, Wi-Fi gratuito y múltiples enchufes incorporados para todos tus dispositivos favoritos. Además, disfrutarás de espaciosas distribuciones con fácil acceso en silla de ruedas, baños accesibles con duchas adaptadas, inodoros con barras de apoyo y asientos de ducha disponibles bajo petición. El hotel también cuenta con una amplia variedad de servicios, como el conserje del Loews Regency New York Hotel, que te ayudará con entradas para el teatro, exposiciones en museos locales o reservas en el nuevo restaurante de moda del que todo el mundo habla. Además, hay Wi-Fi gratuito en todas las habitaciones y áreas públicas, un gimnasio abierto todos los días y el programa Loews Loves Pets, pionero en la industria y lanzado en el año 2000.
En cuanto a la gastronomía, el Regency Bar & Grill, el icónico restaurante del Loews Regency New York Hotel, es el hogar del famoso "Power Breakfast" y ofrece deliciosos platos con ingredientes locales. Aquí, tanto neoyorquinos como huéspedes del hotel tienen la oportunidad perfecta para observar a las personas y cenar entre los profesionales más influyentes de la ciudad de Nueva York.